ES CUESTIÓN DE PRIORIDADES

Antes de decir lo que pensaba, 

dije lo que sentía... esa era

toda mi verdad.

Por un momento pensaba que nada tenía sentido.

Yo, era tan solo un ser extraño en una parte de mi 

mente que ni yo misma conocía.

Me empezaba a derrumbar... era la sensación más rara que jamás pude notar tan dentro.

Tanto sentimiento junto no podía ser bueno. ¿Era yo la que lloraba o... tú? que vives tan dentro de mi, que eres capaz de eso y todo. De vivir en mi y sentir yo cada lágrima que se desliza por tus mejillas. ¿Por qué pasamos de ser todo a tener nada? Quise creer que todo no acababa, pero cuando pude abrir los ojos, no te veía, ni a ti ni a nadie. Pude asegurar, desde entonces, que no quería sentir a nadie más que no fueras tú. 

Pero te juro, maldito amor de mierda, que cualquier día me 

arranco el corazón y me voy... 

Lejos. 

Y es que esta lucha entre mente y corazón no compensa. 

Por eso lo de sentirme rara hasta el punto de no reconocerme. 

Por eso lo de querer huir...

Aún me queda dentro la necesidad de desahogarme más de lo que lo hice, deberías saber que en la vida todo es cuestión de prioridades y por eso

me elijo a mi a pesar de que tú seas la prioridad de prioridades, uno debe saber elegirse a sí mismo para sentirse bien. Y eso hago. Todo se resume en: ¿cómo puedes sacarme de quicio y darme vida a la vez? Necesito tiempo. Y mi propia prioridad.

NCMS